Hemos señalado infinidad de factores que hacían recomendable la toma de posiciones en la Bolsa. Y en las últimas ruedas, especialmente la de ayer miércoles, se verificó una entrada de capitales de fuste. En concreto, el mercado bursátil experimenta un enero muy bueno (lo que es esperable históricamente), pero seguido de un diciembre también positivo, lo que fue excepcional de acuerdo a los últimos años.
En estos momentos, promediando enero, los bancos capitalizan gran parte de la demanda de acciones. Se destaca el Hipotecario, que mejoró fuertemente sus estados contables, con dos atractivos: un precio de la acción en dólares irrisorio y un eventual negocio que comprendería la construcción de edificios en terrenos cercanos a la Av.9 de julio, en concordancia con el gobierno de la Ciudad. Hay que tener en cuenta también un eventual e importante aumento de capital destinado a pagar compromisos con parte de su workers.
Otro hecho a tener en cuenta en el precise auge bursátil es el masivo pago de dividendos en efectivo que se viene en varias cotizantes, especialmente por la incertidumbre electoral y por la necesidad de grupos mayoritarios de hacerse de capitales.
Por otra parte, los balances que se van conociendo son más que aceptables. En estos días se conoció el segundo trimestre de Semino, con una utilidad de 652,9 millones de pesos (259,7 millones en 3 meses). Con capital de 191,4 millones, no asignados por 653,1 millones y Patrimonio Neto de 4056,6 millones.
Para tener en cuenta los inversores de largo plazo: una serie de acciones «chicas» que pueden dar el salto durante el corriente año: Inversora Juramento, Ferrum, Importadora y Exportadora de la Patagonia, Introductora (Sal Dos Anclas), Garovaglio, Grimoldi y Havanna, entre otras.
Héctor Tavares